cap.1 EL MISTERIO DE LA ATLÁNTIDA pag. 42-44
teruruguay@gmail.com (pag.42-44)
Inmediatamente después del diluvio sucedió una segunda catástrofe. En el libro de Crónicas encontramos la siguiente narración: "Y a Heber nacieron dos hijos; el nombre del uno fue Peleg, por cuanto en sus días fue dividida la tierra..." (1 Crónicas 1:19). Aquí no se trata de la distribución de la tierra en lotes separados, porque en aquellos tiempos cuando la Humanidad aún no se había multiplicado no hacía falta distribuirla. Se trata de una catástrofe que motivó la división -ruptura del mismo planeta.
Actualmente está demostrado que en cierta época existía un continente entre Europa y América que posteriormente desapareció. El mundo sabio está de acuerdo en que el actual Océano Atlántico cubre el vasto continente primitivamente llamado Atlántida. Su desaparición se produjo a raíz de alguna catástrofe. Por supuesto que esta catástrofe atañe a tiempos muy remotos. La Biblia afirma que la Tierra se dividió en los días de Peleg.
La familia humana, que por aquel tiempo estaba esparcida por toda la faz de la Tierra, resultó cortada del resto de sus miembros y vino a parar en otro continente, y es posible que se internara en algunas islas.
En esta segunda catástrofe se estableció el equilibrio de la Tierra, su clima y las condiciones de vida para todos sus habitantes. De esta manera, las dos grandes catástrofes sucesivas cambiaron no sólo la faz de nuestra Tierra, sino que también el cielo terrestre, es decir, la atmósfera que circundaba la Tierra. "Por lo cual el mundo de entonces pereció anegado en agua; pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos" (2 Pedro 3:6,7). De esta manera las dos catástrofes mencionadas borraron de sobre la faz de la Tierra todo vestigio del antiguo reino de Dios, ante cuyo aspecto los ángeles se regocijaban.
Inmediatamente después del diluvio sucedió una segunda catástrofe. En el libro de Crónicas encontramos la siguiente narración: "Y a Heber nacieron dos hijos; el nombre del uno fue Peleg, por cuanto en sus días fue dividida la tierra..." (1 Crónicas 1:19). Aquí no se trata de la distribución de la tierra en lotes separados, porque en aquellos tiempos cuando la Humanidad aún no se había multiplicado no hacía falta distribuirla. Se trata de una catástrofe que motivó la división -ruptura del mismo planeta.
Actualmente está demostrado que en cierta época existía un continente entre Europa y América que posteriormente desapareció. El mundo sabio está de acuerdo en que el actual Océano Atlántico cubre el vasto continente primitivamente llamado Atlántida. Su desaparición se produjo a raíz de alguna catástrofe. Por supuesto que esta catástrofe atañe a tiempos muy remotos. La Biblia afirma que la Tierra se dividió en los días de Peleg.
La familia humana, que por aquel tiempo estaba esparcida por toda la faz de la Tierra, resultó cortada del resto de sus miembros y vino a parar en otro continente, y es posible que se internara en algunas islas.
En esta segunda catástrofe se estableció el equilibrio de la Tierra, su clima y las condiciones de vida para todos sus habitantes. De esta manera, las dos grandes catástrofes sucesivas cambiaron no sólo la faz de nuestra Tierra, sino que también el cielo terrestre, es decir, la atmósfera que circundaba la Tierra. "Por lo cual el mundo de entonces pereció anegado en agua; pero los cielos y la tierra que existen ahora, están reservados por la misma palabra, guardados para el fuego en el día del juicio y de la perdición de los hombres impíos" (2 Pedro 3:6,7). De esta manera las dos catástrofes mencionadas borraron de sobre la faz de la Tierra todo vestigio del antiguo reino de Dios, ante cuyo aspecto los ángeles se regocijaban.
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